Tras quizá, una partida apresurada, esta institución que lo tuvo entre los grandes hombres que la han presidido (1984-1985), le rinde homenaje por su aporte, constancia y eterna lucha en busca de construir un mejor país, al cual por su personalidad llena de optimismo y buen ánimo, siempre vio como el mejor del mundo y del cual nunca se quiso ir.
Luis Augusto Vegas Benedetti, buen amigo, padre y profesional, quien será recordado con afecto por quienes lo conocieron y compartieron alguna etapa de su vida, nos deja a todos una enseñanza que reafirma que la esperanza siempre será la motivación para la perseverancia.
Sus importantes aportes, producto del ingenio, su visión siempre anticipada y una capacidad única para proyectar los negocios, son ejemplo para quienes siguen la trayectoria de personajes que sembraron ideas, consolidaron las bases y han sido forjadores de valores y principios fundamentales para el progreso.
Nuestro respeto por su legado y al valioso hombre siempre activo que luchó incansablemente hasta su rápida despedida.
Buen viaje amigo Yuto.

Ser creativos, sortear obstáculos y sobretodo creer en la pasión que nos mueve, son claves para seguir adelante trabajando en lo que nos gusta, porque buscar alternativas y reinventarse como profesional, es la opción para quienes deseamos seguir esforzándonos y sobrellevar las adversidades del duro camino que nos toca vivir a los venezolanos.
Reconocidos profesionales han decido darle la vuelta a la situación para encarar la crisis, pero con sacrificios y mucha dedicación, ven que aún hay un mundo de posibilidades por delante y que es el momento propicio para aprovecharlo.
Lo interesante para muchos son las ventanas que se abren con la constancia, dedicación y optimismo, pero sobretodo hacer lo que les gusta aunque obligue adaptarse y enfrentar una serie de desafíos.
Descubrir áreas nuevas, aprender, volver a estudiar y trabajar con más ahínco es la solución para quienes siguen aquí y aún creen en Venezuela y en el poder de su gente.
Ver el país a largo plazo y darse la oportunidad de construirlo es lo que engloba el pensamiento del grupo de profesionales que comparten sus experiencias en esta edición y que sobretodo mantienen las esperanzas y buscan incansablemente la manera de hacer realidad sus sueños.

Hay aromas que van más allá del olfato, a tal punto que con solo mencionarlos nos generan una cantidad de sensaciones y gratos recuerdos que pueden hasta hacernos percibir su sabor… se trata del café y el cacao, dos maravillosos cultivos venezolanos catalogados entre los mejores del planeta.
Pero es que la tradición de tomarse un cafecito se mantiene y se extiende coma alternativa no sólo gastronómica, sino como actividad social y de esparcimiento, lo que ha fomentado a nivel mundial la creación de nuevos espacios para sentarse y disfrutar de estas bebidas o bien deleitarse con un buen dulce preparado con chocolate, porque el café y el cacao van de la mano, en repostería, comidas, bebidas y confitería.
En esta edición expertos comparten sus experiencias y nos muestran la importancia de estos dos productos nacionales, así como la proyección de lo “hecho en Venezuela”, porque gozamos de fama internacional por la calidad y versatilidad de nuestras semillas de cacao y de café.
Hay un interesante trabajo que ejecutan los especialistas que se han dedicado a fomentar estos rubros (empresarios, chef y baristas), quienes aparte de amar lo que hacen, están totalmente convencidos de resaltar las fortalezas y bondades de lo nuestro, bien con las tabletas de chocolate, bombonería y pastelería o mediante la preparación de variados y cremosos cafés.
Invitamos a deleitarse con esta provocativa edición y lo convidamos a saborearla hasta la última página.

La Cámara de Caracas con esta edición especial En Memoria a Gustavo J. Vollmer Herrera, desea rendirle homenaje y hacerle un pequeño tributo a este maravilloso ciudadano y empresario, quien siempre firme en sus convicciones y con un particular empuje que nunca perdió, le dejó a Venezuela importantes aportes fruto de su incansable dedicación y trabajo.
Durante su vida Gustavo J. Vollmer cultivó sus sólidos principios personales y valoró dos importantes tesoros que siempre lo acompañaron: su familia y su trabajo, siendo para él la motivación de sus grandes contribuciones y el equilibrio que le permitió desarrollar sus proyectos y dejar un sólido legado.
Orgulloso siempre de su gran familia conformada por 100 integrantes, Fofoto dejó un grato recuerdo entre todos los que compartieron con él, así como las nobles enseñanzas que con una particular huella seguirán trascendiendo entre sus descendientes y amigos.
Desde esta tribuna hacemos honor a quien también fue Presidente de la Cámara de Industriales de Caracas durante los años 1951 y 1954-1956, por habernos acompañado y compartir con esta institución sus gratas experiencias, y sembrar con su noble enseñanza, la peculiar semilla de un excepcional venezolano.

Libros, Librerías y Libreros es el tema ofrecido en esta nueva edición, la cual fue pensada en un momento complejo para el sector editorial venezolano, en el que existen múltiples esfuerzos para mantener vivo el valor de un libro, el esfuerzo de sus escritores, el negocio editorial y sobretodo el placer de los lectores por disfrutar de una amena lectura.